En el Centro Cultural Santa Ana. Foto: Fátima Díez |
La asociación cultural Cómplices Literarios Elkartea, de Portugalete, tuvo a bien incluir en su agenda la presentación de mi segunda novela, Por Caridad.
Paco y yo llegamos a Bilbao dos días antes, ya que el día 3 iba a ser entrevistada por la periodista Susana Porras, en el programa Objetivo Bizkaia, de Tele7. Fue un verdadero placer departir con esta gran profesional, persona afable como ella sola.
Después de la entrevista, nos apresuramos para llegar a tiempo al Fnac de Bilbao, donde Salvador Robles Miras presentaba, esa misma tarde, su novela Una voz en la noche, compitiendo con la climatología adversa y el partido del Athletic de Bilbao, que en Euskadi es una religión. Aún así, Salvador triunfó.
Después de la entrevista, nos apresuramos para llegar a tiempo al Fnac de Bilbao, donde Salvador Robles Miras presentaba, esa misma tarde, su novela Una voz en la noche, compitiendo con la climatología adversa y el partido del Athletic de Bilbao, que en Euskadi es una religión. Aún así, Salvador triunfó.
Entre cita y cita nos dimos algunos paseos por la bella Portugalete, que ya sea bajo un sol radiante o un cielo nublado, conserva intacto su hechizo.
Y llegó el jueves, 4 de abril. Una hora antes del evento ya estábamos todos en el segundo piso del Centro Cultural Santa Clara. El Baúl de Pessoa probando la megafonía, Adrián y yo, ayudados por el amable conserje, a vueltas con el pendrive, y el ordenador a su bola. Empezaron a llegar los asistentes, y la primera en hacerlo fue la escritora y amiga Fátima Díez, recién terminada la tanda de presentaciones de su novela Contra el olvido.
El vídeo nos daba problemas. Al final tuvimos que cambiar el orden y eso hizo que yo hablara antes de lo previsto y que machacara parte del guión al presentador. No se notó porque Adrián tiene gracia y tablas de sobra para improvisaciones y reajustes de último momento. Eso se notó especialmente por la forma de rematar alguna que otra "incidencia" sobrevenida. Y no digo más.
El Baúl de Pessoa interpretó dos versiones y un tema propio, de esos que se te pegan al oído y te los llevas puestos a casa. Voces preciosas e interpretación magnífica. El público quería más, pero había que ir terminando.
Los capítulos de Por Caridad son muy cortos, y ello dio pie a que Cristina Benavent Atienza nos leyese con arte dos de ellos. El primero se lo había sugerido yo, para el otro le di a escoger. Curiosamente eligió el mismo que yo leí en la Universidad Popular de Tres Cantos. Empatía supongo.
Llegada la ronda de preguntas quedó patente que el tema interesa, aunque no pudimos prolongarlo mucho, ya que había que cerrar la sala y quedaban las firmas, que por suerte abundaron. Y así puede ir saludando uno a uno a los que se acercaron, entre ellos algunos más conocidos, como las dos simpáticas propietarias de la Librería Guantes, que llevaron los libros, o la escritora Mari Carmen Azcona, y el también escritor José Manuel Aparicio. Hubo sorpresas entre el público de personas que yo no esperaba, a las que abracé con gran ilusión por mi parte.
Ya he recibido mensajes de algunos asistentes, diciéndome —con agrado— que ya han leído la novela, cosa factible ya que puede hacerse cómodamente en unas tres horas. Y es que nunca dije tanto con tan poco, juraría.
El viernes por la mañana, leré, regresamos a Madrid con otra colección de buenos recuerdos portugalujos.
Ya he recibido mensajes de algunos asistentes, diciéndome —con agrado— que ya han leído la novela, cosa factible ya que puede hacerse cómodamente en unas tres horas. Y es que nunca dije tanto con tan poco, juraría.
El viernes por la mañana, leré, regresamos a Madrid con otra colección de buenos recuerdos portugalujos.
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